TOTAL WHITE

¡Buenos días! ¿Cómo estáis? Hoy queremos traeros una propuesta distinta: hemos dejado a un lado el nail art para presentaros unas uñas lisas y monocolor. Sin embargo, y como nos gusta que nuestras manicuras sean originales, hemos elegido un color vibrante, llamativo y poderoso. Aprovechamos para presentarte los tips definitivos para que aprendas a domar tu esmalte blanco y por fin consigas esa manicura que siempre se te resiste. ¡Vamos allá!

#1 Elige un blanco cubriente

Como no podía ser de otra manera, nosotros te presentamos a nuestra estrella: Frost White. Y está muy bien, no porque lo digamos nosotros, sino porque cumple con los requisitos que debes exigirle siempre a un blanco:

• Una buena cobertura. Y si ya consigues que cubra con una capa, ¡perfecto!
• Que seque rápido; como recomendamos dar dos capas finas, siempre es mejor que busques un esmalte que no tarde mucho en secarse.
• Que tenga una textura líquida. Por su composición, la mayoría de los esmaltes blancos del mercado tienden a espesarse pronto. Si esto sucede, no alargues la vida útil del esmalte más de lo necesario: repón tu Frost White.

Con esta combinación de tips evitaremos algunos de los errores estéticos más frecuentes en las manicuras blancas:

• Que se noten los trazos del pincel.
• Manicuras muy abultadas (a veces damos tres capas, y cuatro… porque el esmalte no consigue la cobertura deseada).
• En relación con el punto anterior: ¡las temidas burbujas! Tantas capas sin secar correctamente acaban pasando factura.

#2 Pon mucho mimo y cuidado a la hora de pintar tus uñas

Normalmente procuramos tener cuidado a la hora de pintar nuestras uñas para no salirnos, con los esmaltes blancos tenemos que tener ¡el doble de cuidado! El contraste que se crea entre el esmalte y nuestra piel estará muy marcado, y el chivato de cualquier desperfecto serán nuestras cutículas.

¡Pero no pasa nada! Gracias a nuestro pincel plano EAB (Pincel de fácil aplicación), tu Frost White se adaptará perfectamente a la forma redondeada de las cutículas, lo cual no evitará que debas pintarte con cuidado. ¿Quieres un truco? Ten a mano un bastoncillo para los oídos y quitaesmaltes: si te sales, podrás limpiar rápidamente el error.

#3 Combínalo con tus outfits

Es cierto que aunque el blanco es un color muy socorrido, no siempre vestimos con prendas blancas. Tenemos que aplicar el mismo truco con nuestros esmaltes. Parece que el blanco es un color que en uñas queda relegado al verano, ¡error! En invierno, úsalo con un total look en negro o con tonos grises y marengos, encajará a la perfección y dará un toque de luz. ¿Y en primavera y verano? Rosas y corales, azul eléctrico, amarillo neón… ¡las combinaciones aumentan!

¿Conocíais alguno de estos consejos? Al igual que nosotros, ¿pensáis que se pueden llevar las uñas en blanco sin caer en la vulgaridad? ¡Os leemos en los comentarios!